<body><script type="text/javascript"> function setAttributeOnload(object, attribute, val) { if(window.addEventListener) { window.addEventListener('load', function(){ object[attribute] = val; }, false); } else { window.attachEvent('onload', function(){ object[attribute] = val; }); } } </script> <div id="navbar-iframe-container"></div> <script type="text/javascript" src="https://apis.google.com/js/platform.js"></script> <script type="text/javascript"> gapi.load("gapi.iframes:gapi.iframes.style.bubble", function() { if (gapi.iframes && gapi.iframes.getContext) { gapi.iframes.getContext().openChild({ url: 'https://www.blogger.com/navbar.g?targetBlogID\x3d21886757\x26blogName\x3dAdriana...+en+espa%C3%B1ol\x26publishMode\x3dPUBLISH_MODE_BLOGSPOT\x26navbarType\x3dBLUE\x26layoutType\x3dCLASSIC\x26searchRoot\x3dhttps://adrianaivette.blogspot.com/search\x26blogLocale\x3den_US\x26v\x3d2\x26homepageUrl\x3dhttp://adrianaivette.blogspot.com/\x26vt\x3d2582532126100413570', where: document.getElementById("navbar-iframe-container"), id: "navbar-iframe" }); } }); </script>

Adriana... en español

"Mis iras, risas, deseos, anhelos, ideas... En este idioma tan extraño, tan olvidado, pero tan mío..."

Esos espacios Sunday, February 26, 2006 |

Es tan fácil echarle la culpa a los demás, pero tan difícil admitir que la culpa no es ajena. El orgullo me consume y se me hace tan difícil pedir perdón, tan difícil admitir que mis errores son mas grandes que los de los demás.

Es tan fácil hablar de lo malo, pero tan difícil hablar de lo bueno. Porque se me hace tan y tan fácil escribir de todo lo malo que haga alguien, de todo lo malo que me pasa; pero cuando quiero escribir de algo bueno, de algo que me produce felicidad, me encuentro sin las palabras para describir algo que parece tan simple, pero no lo es.


La felicidad parece ser más abstracta que la amargura, que las lágrimas y que las frustraciones. La felicidad parece ser una cosa tan invisible, tan pasajera tal vez, que no puedo encontrar las fuerzas ni las palabras para poder visualizarla, describirla.

Y mis frustraciones, que también son pasajeras, las encuentro a mi disposición, modelando para mi pintura, modelando su cuerpo tan presente que no tengo que imaginar cosas que no están allí. Pinto las frustraciones con las palabras, dando un cuadro que es tan real y tan doloroso como el modelo que tuve de frente.


Con las palabras pinto cada color, cada detalle, cada forma y cada contorno de las frustraciones. Pero la felicidad parece ser sólo un simple susurro que no puedo pintar, una sensación tan presente pero tan imposible de moldear. Entonces la felicidad envuelve cada parte de mi ser, pero no está ahí de frente, no está dispuesta a modelar para mí, como un fantasma que oigo, siento… pero que no veo.

Mi vida medida por estas palabras parece ser una historia fatal, un cuento de horror y sufrimiento; lágrimas que parecen ser infinitas. Pero son esos espacios entre cada escrito, quizás los espacios entre cada palabra, los que relatan la felicidad… Ese silencio que trata de describir lo que realmente ha sido mi vida, aquellos momentos que sí quiero recordar.

Ahogada en sal Friday, February 24, 2006 |

Ya no sé si tú eres el que no me contesta o soy yo la que no te pregunto.

Ya no sé si quiero tus palabras o tu silencio.

Ya no sé so prefiero tu empatía o tu indiferencia.

Ya no sé si necesito tu compañía o tu ausencia.

Ya no sé si me gustan los días felices o los tristes.

Ya no sé si prefiero la ironía o los chistes.

Ya no sé quien soy ni la que quiero ser.

Ya no sé si duele más tu ausencia o tu indiferencia.

Ya no sé si quiero saber el pasado o ser ignorante.

Ya no sé si quiero oír la verdad o una mentira piadosa.

Ya no sé si veo el espejismo o la realidad.

Ya no sé si eres tú el que me hablas o yo que te invento.

Ya no sé si estas son inseguridades o una premonición.

Ya no sé si te ahogas con tus palabras como lo hago yo.

Ya no sé si he callado todo y he dicho nada.

Ya no sé si he evitado los conflictos o si los he empezado.

Ya no sé si estoy viviendo o si me estoy muriendo.

Ya no sé si ves en mí aquella persona que alguna vez viste.

Ya no sé si soy yo la que he cambiado o has sido tú.

Ya no sé tantas cosas que me he dado por vencida.

Ya no sé nada, justo cuando creía saberlo todo.

Ya no sé si son las lágrimas las que me ahogan…
… o si soy yo quien me ahogo en ellas.

Estas lágrimas Tuesday, February 21, 2006 |

Estas lágrimas que derramo, estas mismas, quiero que sepas que son por ti, por todas esas palabras, por todas esas veces, por todas esas peleas, por todos esos recuerdos.

Tú, quien alguna vez pensé que podría llegar a ser mi aliada, mi amiga.

Tú, por quien he pretendido ser este espejismo de persona, esta persona que ya ni reconozco.

Tú, que me has hecho dudar de mí misma, dudar cada palabra que sale de esta boca.

Tú, quien habita en mí, la voz en mi cabeza, mi conciencia.

Tú, en la que pienso a la hora de tomar cualquier decisión.

Tú, quien ha hecho que mi vida sea un fastidio.

Tú, de quien duelen las palabras pero de quien duelen más los silencios.

Tú, la que me enseñó que lo físico no es todo, pero sí importa.

Tú, que has hecho que me esmere con tus constantes críticas.

Tú, por quien he cambiado cada fibra de mi ser.

Tú, por quien he pretendido ser otra persona por tanto tiempo que ya no se ni quien soy yo.

Tú, la injusta, la intolerable, la fría; pero tan parte de mí que no te puedo negar.

Tú, si, tú misma, mi punto de partida, mi principio y tal vez mi fin.

Tú, de quien vengo, mi espejo, mi tormento, mi oráculo, mi pasaje al futuro.

Tú, la que me dio la vida y la que tiene el poder de destruirla.

Tú, la que la puede destruirme con una simple mirada, una simple palabra, un gesto.

Tú, la que puede reconstruir mi mundo si solamente aceptara esta persona que soy.

Tú, por quien tengo que mirar a sus ojos, a los ojos de él, para empezar a comprender quien soy.

Estas lágrimas que corren por mis mejillas son testigo de los recuerdos, esos recuerdos que me destruyen tanto como tu risa burlona y tu indiferencia. Estas lágrimas, madre, estas lágrimas quiero que sepas que son por ti.

Alguna vez Saturday, February 18, 2006 |

Alguna vez pensé que no era capaz de herir a alguien.

Alguna vez sentí que mi fe era inquiebrable.

Alguna vez derramé lágrimas por quien no se las merecía.

Alguna vez quise dejar de ser la misma.

Alguna vez me aventuré a desear lo inalcanzable.

Alguna vez deseé aprender a ser amable.

Alguna vez conocí a aquel que hoy me hace sonreír.

Alguna vez desestimé lo que significaba vivir.

Alguna vez miré este reflejo y no soportaba mirar.

Alguna vez grité porque no me quería callar.

Alguna vez mentí por no herir.

Alguna vez no vi quien era la que habitaba en mí.

Alguna vez lloré por las palabras que alguien dijo.

Alguna vez llené mis fantasías de eternos optimismos.

Alguna vez sufrí por la oscuridad de un abismo.

Alguna vez entendí lo que es un amor de espejismos.

Pero ahora me doy cuenta de que lo que alguna vez pensé, sentí, creí, o viví es un efímero espejismo de lo que alguna vez fue mi vida.

Perdóname, amiga... Sunday, February 12, 2006 |

Perdóname, amiga, si te dije todas esas cosas que no querías escuchar.

Perdóname, amiga, si mi paciencia no se hizo notar.

Perdóname, amiga, si alguna vez te hice creer que el mundo era todo lo que querías escuchar.

Perdóname, amiga, porque mis oídos no giran en torno a ti.

Perdóname, amiga, si alguna vez te dejé creer que yo solamente estoy aquí para escuchar.

Perdóname, amiga, si ya me harté de ser quien te escucha hablar solo de ti últimamente.

Perdóname, amiga, por tener problemas de los cuales preocuparme.

Perdóname, amiga, si mi vida no es tan color de rosa como aparentase.

Perdóname, amiga, si no te entiendo, si no te comprendo y si ya no sé que decir.

Perdóname, amiga, por perder la paciencia y por ser aquella a quien no le importa lo que dice a los demás.

Perdóname, amiga, por no ser aquella que alguna vez pretendió ser.

Perdóname, amiga, por ser este fragmento de persona que ya no reconoces.

Perdóname, amiga, por hacerte creer que el mundo era el que estaba en tu contra y no tú en contra de él.

Perdóname, amiga, por tener tanto derecho a enojarme como tú.

Perdóname, amiga, por ser humana y cometer errores.

Perdóname, amiga, por decir la verdad, por decir lo que veo.

Perdóname, amiga, por escribir estas palabras que quizás te hieren, pero me liberan a mí.

No te creas... Saturday, February 04, 2006 |

No te creas que no me doy cuenta de tus farsas, de esas mascaras que intentan ocultar conflicto.

No te creas que no veo lo que haces, lo que piensas y lo que sientes.

No te creas que no puedo oír y saborear el tono amargo de tu voz.

No te creas que seguiré siendo aquella que no mostraba su enojo.

No te creas que seguiré evitando peleas mientras respiro hondo.

No te creas que no se lo que has de decir de mí, de que carga soy.

No te creas que seguiré siendo el espejismo de la misma idiota que alguna vez conociste.

No te creas que con creer conocerme tan bien y ridiculizar mis intentos me vas a callar; más bien me enfadas y me das más razón para escribir.

No te creas que le tengo miedo a las palabras que escribo.

No te creas que esto lo hago por ti; si no que lo hago por mí, por mi mente y por estos dedos que escriben las palabras.

No te creas que cada vez que traes el pasado al presente no me hiere, que no lo siento.

No te creas que soy tan fuerte como intento parecer, tengo un corazón, aunque lo quisiera convertir en piedra.

No te creas que no me duele la ironía, la indiferencia y la crítica.

No te creas que me conformaré con un beso tuyo para callar mi alma, lo aceptaré, pero no me callaré.

Vivir y morir Thursday, February 02, 2006 |

Vivo, porque no quiero morir.

Siento, porque soy de carne y hueso.

Amo, porque esta vida es tan hermosa como tan cruel.

Me asombro, porque cada día que pasa ofrece algún tipo de conocimiento.

Anhelo los segundos de estar con aquel a quien amo y me destruyen los segundos, minutos y horas que ocupan la ausencia.

Río, porque no quiero llorar, porque siento un dolor tan mío que nadie lo tiene que compartir, porque mi sonrisa es la mejor defensa que tengo.

Me arriesgo porque tengo miedo, tengo miedo de perder lo que tengo, pero más miedo de no saber cómo se siente arriesgarlo todo.

Pienso, porque no dejaré que alguien domine mi existencia.

Cuestiono, porque hay preguntas que no tienen respuesta.

Escribo, porque las palabras son mi mejor aliado, porque hay miles de mundos que hay que explorar, miles de posibilidades de las cuales escribir.

Leo, para enriquecer mi alma, para que ésta sepa lo que es vivir a través de las palabras y morir cuando estas se acaban.

Ese idioma tan extraño, pero tan mío... |

Tengo ganas, deseos, anhelos de escribir sin que nadie me detenga.

Quiero dejar que las palabras se deslizen por la página sin preguntar el por qué, ni el cómo.

Quiero escribir en este idioma tan extraño para mí, en este idioma que utilizo sólo para la comunicación oral, pero no la escrita.

Quiero escribir en este idioma del cual me he alejado, en este idioma que es mi amigo de niñez, mi compañero fiel, que es tan mío que aunque no lo quiera es el que llevo pegado al corazón e impregnado en la misma sangre que corre por mis venas. Esa sangre que no puede negar sus comienzos, sus raices, esas mismas raices que están destinadas a ser su fin.

Quiero que las palabras fluyan a través de éste espacio, esas palabras que vienen de esta persona que piensa formula ideas en otro idioma que no es el suyo pero anhela volver a tener contacto con el idioma que fue marcada el día de su nacimiento. Y ese otro idioma la domina y parece definir la esencia de su ser.

¿No es un idioma una mera representación de las ideas de un individuo y no de su ideología?